La
Asamblea General de la ONU acaba de adoptar la Agenda 2030 para el Desarrollo
Sostenible, como “un plan de acción a favor de las personas, el planeta y la
prosperidad, que también tiene la intención de fortalecer la paz universal y el
acceso a la justicia”. Esta resolución reconoce “que el mayor desafío del mundo
actual es la erradicación de la pobreza” y se afirma que sin lograrla no puede
haber desarrollo sostenible. El texto aprobado menciona que la nueva estrategia
contenida en los Objetivos de Desarrollo Sostenible “regirá los programas de
desarrollo mundiales durante los próximos 15 años. Al adoptarla, los Estados se
comprometieron a movilizar los medios necesarios para su implementación
mediante alianzas centradas especialmente en las necesidades de los más pobres
y vulnerables”.
A Einstein se le atribuye la frase: “locura
es pretender obtener resultados diferentes haciendo lo mismo”; si se mantienen
las pautas que han llevado a la situación actual ¿cómo esperar que las cosas
cambien? Sin un cambio radical de paradigma no habrá posibilidad alguna de
alcanzar esos objetivos y todo quedará en una declaración más de buenas
intenciones; como ha pasado con los Objetivos de Desarrollo del Milenio, aprobados
hace 15 años, y cuyas metas para este 2015 están, en la mayoría de los caso,
lejos de alcanzarse. ¿Cómo lograr objetivos tan ambiciosos, además de urgentes
y necesarios, si no se revierten las causas estructurales del estado actual de cosas?
La crisis ambiental, de pobreza y de violencia que se vive en el mundo requiere
de acciones decididas que subviertan de
una vez por todas las lógicas imperantes en la interacción social y con el
medio ambiente.
Ese cambio radical de paradigma deberá estar
basado en una “revolución ética estructural-radical”
que paute nuevos derroteros para la convivencia humana y la relación
sociedad-naturaleza, que nos disponga e incentive a la cooperación y la
relación armónica con el ambiente. Para muchos, estas afirmaciones parecen
estar fuera de la realidad, ser románticas, incluso ingenuas; se me ha dicho
que son consideraciones que obvian las leyes de la historia y la lógica del
poder; pero hay que insistir que sin tal revolución ética, todo seguirá conforme
a las mismas tendencias y ninguno de los propósitos acordados por la comunidad internacional
se verán cumplidos.
Esta “revolución ética estructural-radical” tiene
desde nuestro punto de vista cuatro componentes que descansan sobre una cultura
de buen trato y del cuidado de uno mismo, de los demás y del entorno. Hablar de
buen trato y de cuidado en su sentido profundo, remite a la regla de oro de
todas las religiones y a las espiritualidades de todos los tiempos y latitudes:
“trata a los demás como quieres ser tratado”; recupera la esencia de la
compasión, la empatía y la solidaridad y reconoce que como seres humanos
estamos impelidos a cooperar porque de los contrario no somos viables como
especie.
Basados en una cultura de buen trato y del cuidado de uno mismo, de los
demás y del entorno, los componentes de esta revolución ética estructural-radical,
sin ser ninguno de ellos más importante que los otros, pueden describirse sucintamente
de la siguiente manera:
1.
Educación e incentivos efectivos para una convivencia pacífica y
colaborativa en los distintos ámbitos de interacción humana, con equidad,
incluyente y respetuosa de la diversidad y de las diferencias.
2. La creación de condiciones
para asegurar una relación sociedad-naturaleza pautada por los límites de la regeneración y la capacidad
de carga de los ecosistemas, y el fin a la extracción minera de recursos
naturales (considerando que todos son no
renovables); además de generación cero de emisiones a la atmósfera y residuos
tóxicos y contaminantes.
3. La
generalización de modelos de producción, distribución, intercambio, movilidad y consumo a escala
comunitaria, en la lógica del buen vivir
y no en la del capital, además de la erradicación de la industria alimentaria
que no nutre, de la producción y uso de agro tóxicos y de los organismos genéticamente
modificados en la producción agrícola.
4. El
aseguramiento de andamiajes legislativos e impartición de justicia cuyo núcleo sea el respeto irrestricto a los
derechos humanos. Tolerancia cero a la
corrupción y a la impunidad.
Sin el despliegue efectivo de estos cuatro
componentes, como resultado de un cambio de paradigma al que las sociedades
humanas se adhieran como una revolución
ética estructural-radical, las causas que perpetúan la pobreza seguirán con el
mismo vigor, el deterioro ambiental y el cambio climático no se detendrán y la
degradación de la convivencia humana se agudizará; quedado los Objetivos
de Desarrollo del Milenio y los Objetivos de Desarrollo Sostenible, como quizá
la última declaración de buenas intenciones en la que se puso de acuerdo la
comunidad internacional; pero sin que haya podido tener efectos positivos en la
realidad del mundo.
Como soy un viejo comunista, que admira a José Mujica, estoy de acuerdo en los cuatro puntos, el driven force sigue siendo el lucro y mientras eso no cambie, vamos contracorriente, pero no hay que bajar la guardia hay que actuar donde estamos y aprovechar SUS llamados a la bandera para ver que se puede hacer desde nuestra trinchera
ResponderEliminarRafa, como Tomas Moro creo que si no pensamos en la realización de la Utopía será imposible llegar a verla como una realidad social.
ResponderEliminarEl trato con jóvenes me hace creer que esto puede convertirse en relidad.
Los jóvenes que fuimos nos permitió pensar en un futuro que hemos ido construyendo hasta hacerlo nuestro presente. Y sin afan triunfalista yo diría que nunca imaginamos las condiciones en las que estamos pero creo que vamos en el camino Sancho..
Estimado Rafa: coincido totalmente con tu exposición, lo cual me hace sentir un poco desesperanzado más que nada por la trayectoria que los seres humanos hemos trazado a lo largo de nuestra existencia. Necesitamos instalarnos bien el chip de la sustentabilidad en todos sentidos, sobre todo porque eso representa nuestra propia permanencia con calidad, en esta vida. Como sociedad civil, por nuestra parte, debemos impulsar esta actitud en todos los sectores de nuestra sociedad. Un abrazo!
ResponderEliminarApareces como unknown ¿quién eres?
EliminarApareces como unknown ¿quién eres?
EliminarApreciado Rafa , recibo con oportunidad y por conducto de CEIBA tu aportación en este Blog que retomo y comparto en mi Facebook y comento que es muy cierto el cambio de paradigma que tenemos que construir e idealizar estas aspiraciones colectivas del bien común , incluso como mandato de cualquier fórmula de gobernanza que podamos conocer ; sin embargo, ante la conectividad y velocidad que abruma a la mayoría autista y silente por estar marginados y aislados, en constantes cambios de poder y guerra; hambruna y enfermedad, así como de guerras intestinas y migraciones cada día mas catastróficas, la moral y las religiones no tocan el tema central que es el ser humano y el bienestar y su calidad de vida y retomo a Bután como ejemplo de los 70´s y paradigma construido sólidamente desde la perspectiva del buen gobierno y esa si que debe de tomarse en cuenta . Una transición pactada con un acuerdo común y traducido en plan y estrategia: The Gross National Happiness. El indice Nacional de Felicidad !!!, saltaron los economistas ( no traigo nada contra ellos), pero como es que eso se traducía en política y planteada por un Rey que paulatinamente fue cumpliendo sus expectativas y generando conocimiento compartido con varios países y corrientes del pensamiento, haciendo epistemologia de esa visión y construyendo capital humano. Obviamente esto difícilmente se ha traducido en grandes campañas de publicidad pero es un hecho véanlo en internet y conozcan los avances y es un país con el mayor índice per capita de áreas conservadas. Por ello, así como lo planteas en la construcción de ese nuevo paradigma debe de haber liderazgos preclaros y éticos, el Papa ha hecho lo suyo con la Encíclica y el Dalai Lama y otros líderes morales y espirituales lo secundaron y el discurso en la ONU fue claro; sin embargo y algo que todos los que nos dedicamos a la naturaleza y su complejidad tenemos muy preciso que todo se maneja ecosistemicamente y en comunidades y poblaciones y las lecciones de la naturaleza no las hemos internalizado en nuestras tomas de decisiones, hasta el año 2000 en resolutivo del CBD reconoce que el hombre es parte de la naturaleza !!!, ahí esta el tema , no con dictadura ni como exterminio o claudicar tener hijos , no !!, se requiere una ética que conlleve lo finito , la dimensión humana y la responsabilidad ambiental pero discutido y concertado con la otredad que siempre esta marginada y pobre, migrando y sobreviviendo; como articular políticas públicas con personas que generalmente no están consideradas ni como público y el tema central entonces es : La Población , la Capacidad de Carga del Planeta, La Huella Ecológica; las Emisiones y Gases de Efecto Invernadero; Los Cambios de Uso del Suelo, entonces y sigo citando efectos y las causas, son: La Población, su dispersión, los hábitos de consumo , la generación de desechos, los abusos y maltrato de los recursos naturales y de los propios seres humanos; cadenas productivas que son círculos viciosos y no virtuosos: en fin La Economía Verde es o será una Utopía sino consideramos esta dimensión humana con responsabilidad ambiental. Abrazo provocador !!
EliminarCiertamente la realidad es de una complejidad abrumadora. Y todavía mucho más compleja la posibilidad de una transformación. Y probablemente como humanidad acabaremos en el despeñadero, pero ciertamente la esperanza en una revolución ética no debe perderse, insistir en que sin ella estamos perdidos. Abrazo para ti tambien.
EliminarCiertamente la realidad es de una complejidad abrumadora. Y todavía mucho más compleja la posibilidad de una transformación. Y probablemente como humanidad acabaremos en el despeñadero, pero ciertamente la esperanza en una revolución ética no debe perderse, insistir en que sin ella estamos perdidos. Abrazo para ti tambien.
EliminarApareces como desconocido ¿quién eres?
ResponderEliminarExcelentye artículo Rafa, quiero que sepas que este año pudimos iniciar un programa en Fundación en el que tenemos muy en cuenta la agenda 20/30. si te metes en la página de la fundación veras un video que realizamos al respecto y que presentamos en la entrega de premios Razón de Ser.
ResponderEliminarUn abrazote
Excelentye artículo Rafa, quiero que sepas que este año pudimos iniciar un programa en Fundación en el que tenemos muy en cuenta la agenda 20/30. si te metes en la página de la fundación veras un video que realizamos al respecto y que presentamos en la entrega de premios Razón de Ser.
ResponderEliminarUn abrazote